Tuesday, July 24, 2007

Citas de Freud

Me permito copiar algunas frases que escribió S. Freud. Algunas de estas están en el ensayo sobre la guerra y sobre la muerte. No recuerdo especificamente las páginas, puesto que las citas las recogí hace algunos años, cuando leí por primera vez estos ensayos tan profundos. Por otra parte, quisiera hacer algún comentario sobre cada cita:

"Nuestra conciencia no es el juez incorruptible que los moralistas suponen, es tan solo, en su origen, “angustia social” y no otra cosa".

De ahí que no crea, en lo personal, que sea práctico enseñar "valores", como se hace en las escuelas e institutos de nuestro país. La sociedad debe imponerse sobre el individuo. El problema se asemeja al huevo y la gallina, pues, quien se impone a quien? ¿El individuo o la sociedad?

"Allí donde la comunidad se abstiene de todo reproche cesa la yugulación de los malos impulsos, y los hombres cometen actos de crueldad, malicia, traición y brutalidad, cuya posibilidad se hubiera creído incompatible con su nivel cultural".

El ejemplo más claro, del siglo pasado, fue la Alemania de Hitler. Ejemplos de hoy en día, abundan...

"Los argumentos lógicos serían impotentes contra los intereses afectivos y por eso, controversias apoyadas en razones son tan estériles en el mundo de los intereses".

Mi abuelo me decía que discutir sobre religión y sobre política no llevaba más que a pleitos (con el uso de la fuerza bruta). La razón es que, en el fondo, buscamos intereses que tienen que ver con la forma de sentirnos y no con razones lógicas. Ejemplo, muchos en nuestro propio país, lamentablemente...

"La tendencia a excluir la muerte de la cuenta de la vida trae consigo otras muchas renuncias y exclusiones"

Una caricatura de El Perich se me viene cuando leo esta frase y su corolario (si quieres vivir, prepárate para la muerte): una tumba solitaria, con una flor en medio, y un globito que sale de dicha tumba diciendo: "Si hubiera sabido que esto era la muerte le hubiera pellizcado la nalga a la Pepita".

"Nuestro inconsciente no cree en la propia muerte, se conduce como si fuera inmortal".

El problema es que, cuando pasamos de los 50, nuestros dolores corporales nos recuerdan que somos esclavos de nuestro cuerpo y del paso del tiempo.

"El héroe no cree en su propia muerte, tal vez esa sea la razón del heroísmo".

No creo que haya un comentario apropiado para tan grande verdad. Al menos, mejor me lo callo.

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