- Vivir, dentro de lo posible, en armonía con uno mismo y con lo que nos rodea.
- Estar dentro del rango normal del peso.
- Tener actividades físicas como parte de la vida diaria.
- Limitar el consumo de alimentos muy energéticos, altos en calorías, grasas y azúcar. Evitar bebidas azucaradas.
- Comer mucha comida de origen vegetal, incluyendo frutas, verduras, granos enteros y frijoles.
- Limitar el consumo de carnes rojas y evitar todas las carnes procesadas.
- Limitar el consumo de alcohol a un trago por día para las mujeres y dos por día, para los hombres. Si no se tiene el hábito de beber alcohol, mejor seguir así.
- Limitar el consumo de sal.
- Tratar de completar los requerimientos nutricionales solamente con la dieta, sin suplementos dietéticos.
Se puede encontrar más información en:
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