Al Filo de la Navaja

Para aquellos que pasamos de los 45 años o más, cualquier promesa de recuperación de la juventud endulza nuestros oídos. La droga HGH, que se produce naturalmente en el proceso del crecimiento humano, pretende recuperar nuestro tiempo perdido, junto con nuestras fuerzas y vigor de juventud.
Entre las promesas que nos hacen con esta droga
están:
1.) Recuperación de la masa muscular.
2.) Disminución de la grasa corporal.
3.) Flexibilidad de la piel y reducir las arrugas.
4.) Regeneración del pelo perdido.
5.) Reducción de las canas.
6.) Aumento de la energía vital.
7.) Aumento del deseo sexual.
8.) Reducción de los niveles de colesterol.
9.) Aumento del tamaño de órganos como el hígado, el páncreas, el corazón y otros órganos que tienen que ver con el envejecimiento.
10.) Mejora de la capacidad de la visión.
11.) Aumento de la retención y la memoria.
12.) Mejor calidad de sueño.
13.) Normalización de la presión sanguínea.
14.) Aumento del riego sanguíneo y más energía.
15.) Mejora del sistema inmunitario.
Y, claro, con estas promesas, cualquiera quisiera
firmar las cláusulas del contrato. Solo que su costo es caro, entre los $10,000
y $12,000 al año, pues el tratamiento mensual es de unos $2,000.

Business Week, sin embargo, llama la atención no
solo sobre el crecimiento de la industria de las drogas anti envejecimiento,
sino sobre la polémica surgida con el uso de éstas. El cáncer es la principal
desventaja que salta a la vista, a pesar de que hay médicos que sostienen que su
uso no puede perjudicar a los usuarios, además del costo alto que tienen los
tratamientos. Tiene a su favor los resultados y la ausencia de cánceres
evidentes en el caso de pacientes de los doctores que son objeto del estudio.

Pero, pese a que haya alguna posibilidad de
riesgo, lo cierto es que el mercado es grande y sigue creciendo.  En lo
personal vuelvo a la nutrición y al ejercicio regular, para mantenerse
saludable.